¿Nunca se te ha ocurrido pensar que quizá cuando nos cuentan un cuento, no nos cuenta todo lo que pasó? Detalles omitidos, secretos no confesables o simplemente historias prohibidas no aptas para menores de edad. Por qué solo conformarnos con un "Y vivieron felices...", eso es mentira. Lo sabemos todos, la princesa y el príncipe no se quedaron toda su vida en el castillo (¿y si lo hicieron a que se dedicaban?). Algo tendrían que hacer para divertirse ¿no?¿o acaso solo se dedicaban a perder zapatos de cristal, comer manzanas envenenadas, matar dragones, cabalgar a lomos de blancos caballos y organizar bailes en castillos?
Si solo se dedicaban a eso me quedo con mi realidad antes que con el cuento, con mi reina de verdad antes que un dibujo falso, nuestra casita real a un palacio, nuestro fiel cachorro a un noble corcel, con nuestra pequeña princesa a esas raquíticas hadas, al amor antes que la imaginación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario